La elongación, o estiramiento, es una herramienta clave para prevenir estos efectos, ya que ayuda a mejorar la flexibilidad, relajar los músculos y mantener la postura correcta.
Según los expertos fisioterapia, una rutina de elongación adecuada no solo reduce el riesgo de lesiones musculares, sino que también aumenta el flujo sanguíneo, favoreciendo la oxigenación de los tejidos y disminuyendo la fatiga.
¿Cada cuánto tiempo debería hacer una pausa para elongar?
No hay una regla fija que se adapte a todos, pero las recomendaciones generales sugieren que hacer una pausa cada 30 a 60 minutos para estirarse es lo ideal.
Durante este breve descanso de trabajo, es recomendable levantarse, moverse un poco y hacer algunos estiramientos. Incluso pueden ser breves, de 2 a 3 minutos, pueden ser suficientes para aliviar tensiones y mejorar la circulación.
Estos son los estiramientos que debes realizar para trabajar sin dolores:
Estiramiento de cuello y hombros: Mientras estes en el trabajo, inclina la cabeza hacia un lado, mantenerla por unos segundos y luego alternar hacia el otro. También se puede rotar suavemente los hombros hacia adelante y hacia atrás.
Estiramiento de muñecas y manos: Para quienes pasan mucho tiempo tecleando en la computadora, estirar las muñecas con movimientos circulares y estirar los dedos es esencial para evitar el síndrome del túnel carpiano.
Estiramiento de piernas: Levantarse y estirar las piernas, haciendo flexiones de rodilla o simplemente caminando unos minutos, ayuda a evitar la rigidez y mejora la circulación en las extremidades inferiores.
Estiramiento de la espalda: Un buen estiramiento para la espalda baja es inclinarse hacia adelante, intentando tocar los pies, o realizar un giro suave de torso mientras te mantienes erguido.
Estiramiento de caderas: Colocar un pie sobre una silla o banco y doblar la rodilla para estirar las caderas es muy beneficioso, ya que el estar mucho tiempo sentado puede tensar esta zona.