La difusión de este material provocó un fuerte repudio en las redes sociales, especialmente entre figuras conocidas por su defensa de los derechos de los animales. Marcela Kloosterboer y Cande Tinelli fueron dos de las voces más críticas, manifestando su rechazo ante las imágenes presentadas por el conductor de LAM. Tinelli reaccionó con un emoji que reflejaba náuseas, mientras que Kloosterboer cuestionó la coherencia de otros involucrados en el debate, incluyendo a Eugenia la China Suárez.
La actriz recordó las declaraciones de Eugenia en el pasado sobre su decisión de adoptar una dieta vegetariana y el amor que siente por los animales. En el marco de esta polémica, Kloosterboer expresó su incredulidad, aludiendo al vínculo entre Suárez e Icardi. “¿Y ella es vegetariana, no? Siempre muy coherente todo”, comentó de manera irónica, rememorando los dichos de Suárez acerca de su transición al veganismo y su defensa del movimiento animalista.
En paralelo, el caso abrió un debate más amplio sobre la participación de menores en actividades de caza y la normalización de estas prácticas dentro de un ámbito familiar. En las imágenes difundidas por Wanda Nara, se observa a su hija ayudando a Icardi a desplumar un ave y a despellejar una liebre, reflejando que estas actividades forman parte de la rutina de la familia. Además, trascendió la existencia de un grupo de WhatsApp familiar llamado “Los cazadores”, donde se compartían imágenes de animales avistados y se coordinaban estas expediciones.
La controversia escaló aún más cuando Ángel de Brito difundió un video donde se veía a Wanda Nara disparando con un rifle a una liebre, contradiciendo sus declaraciones previas en las que aseguraba no participar en estas actividades. Según el periodista, el material fue proporcionado por el propio Icardi, quien buscó exponer la supuesta hipocresía de su expareja. “Me escribió por Instagram y me recriminó: ‘¿A la Wandix cazadora no la subís?’. Entonces le dije: ‘dámela y la subo’”, relató De Brito, añadiendo que en el video se escucha una voz en off celebrando el disparo.
El enfrentamiento entre Wanda Nara y Mauro Icardi, marcado por la exposición mutua a través de los medios, volvió a poner sobre la mesa no solo las tensiones familiares, sino también las implicaciones éticas de incluir a menores en estas actividades y la responsabilidad de quienes eligen compartir este tipo de contenido con el público.