Se trata de una nueva medida que lleva adelante la gestión de Javier Milei en el marco de su primer año de mandato, luego de lo que ocurrió con el ex Centro Cultural Kirchner, que cambió de nomenclatura por el Palacio Libertad.
Los argumentos del Gobierno para el cambio de nombre del ex Gasoducto Néstor Kirchner
“La denominación y/o identificación de obras de infraestructura pública, monumentos históricos, edificios y afines en ningún caso debería responder a intereses políticos, atento a que se desvirtuaría la finalidad y el significado cultural de estos, confundiendo lo público con lo partidario y le harían perder la neutralidad propia de estos bienes, excluyendo a aquellos que no comparten una misma mirada política y conspirando contra el objetivo de constituir la unión nacional, señalada en el Preámbulo de la Constitución Nacional”, señalaron en los considerandos de la norma.
Agregaron que “es imperioso en la actual situación de recomposición de valores básicos y fundacionales transmitir a las generaciones presentes y futuras el espíritu y la acción de los próceres de la Patria y lo que hoy guía en la acción pública: la libertad, la educación y el respeto por las instituciones”.
“Corresponde relacionar de otra manera al gasoducto que transporta gas natural con punto de partida desde las proximidades de Tratayén en la Provincia del Neuquén, atravesando las Provincias de Río Negro y La Pampa, pasando por Salliqueló en la Provincia de Buenos Aires, hasta las proximidades de la Ciudad de San Jerónimo, en la Provincia de Santa Fe, de modo tal que su asociación refleje los valores fundamentales de la República Argentina”.
Y marcaron sobre el nuevo nombre, al asegurar que el trabajo del Perito Francisco Pascasio Moreno “contribuyó al desarrollo y consolidación de la soberanía argentina, a la integración de todo el territorio nacional, así como a la creación y fortalecimiento de instituciones trascendentes para la Nación”.
FUENTE: A24