Al mismo tiempo, opinó sobre los comicios en el peronismo: “Es un problema de la oposición, ahora... también hay una parte de morbo y es que me encantaría meterle el último clavo al cajón del kirchnerismo, con Cristina adentro”.
Respecto de Villarruel, el jefe de Estado cuestionó la visita que su compañera de fórmula le hizo en España a la ex presidenta Isabel Perón, al remarcar que él “no lo hubiera hecho”, porque esa dirigente “no tuvo ningún mérito intelectual ni profesional” para haber estado en ese cargo.
“No solo eso, sino que además me parece que un gobierno de esas características, que derivó en el Rodrigazo, no es un modelo a seguir, y tampoco me parece razonable hacer una reivindicación de alguien que creó la Triple A y que firmó el Decreto de Aniquilamiento, cuando en realidad las Fuerzas Armadas y de Seguridad venían combatiendo a las guerrillas con otros instrumentos”, criticó.
También señaló que tiene “una gran relación” con Mauricio Macri y reconoció que “a veces” consulta con él para cubrir determinados cargos, “porque la verdad es que la experiencia tiene un valor importante en estas cosas y hay sectores que son muy delicados”.
“Si usted me puede aportar personas valiosas para resolver los problemas, yo no tengo ningún inconveniente en incorporarlo a la estructura”, manifestó.
De cara a las elecciones del 2025, reveló que su idea es confluir con el PRO “en todo el país” y desestimó una candidatura de su hermana Karina, aunque no cerró la puerta a esta posibilidad: “Yo no la veo con intenciones, creo que lo hace más por el hecho de que tengamos una estructura y no tengamos que ceder a ciertas extorsiones propias de la política, pero creo que tiene que ver con las preferencias de ella”.
Respecto de la batalla con la AFA, el jefe de Estado consideró que “podríamos tener una liga local de mucha mejor calidad si no fuera por los manejos turbios” de las actuales autoridades de la entidad deportiva y pidió “darles la posibilidad” a los clubes de decidir si quieren convertirse en sociedades anónimas.